Con el fin de salvaguardar la salud de los compradores de agua embotellada, la Dirección de Justicia, Control y Vigilancia, de la Municipalidad de Pasaje, coordinó la inspección a cuatro envasadoras del líquido vital en la cabecera cantonal y una de ellas fue clausurada.
El director del referido departamento, Luis Alberto Morocho García, explicó que en este operativo se solicitó el apoyo de los técnicos de AGUAPAS, y de la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria, ARCSA.
“En estas visitas, la Comisaría Municipal tomó la posta y junto con el personal de AGUAPAS y la ARCSA, se acudió a las plantas de embotellamiento para determinar si cumplían o no con los requerimientos estipulados para este tipo de actividad”, manifestó el director Morocho.
El comisario municipal, Marcelo Orellana Redrován, señaló que la mañana del 4 de octubre, estuvo junto con los técnicos de las instituciones mencionadas en las cuatro envasadoras y que se procedió con las gestiones que manda la Ley.
“La novedad que encontramos fue que, en una de esas plantas de embotellamiento, los administradores no presentaron el reporte del análisis físico-químico-microbacteriológico, informe indispensable para conocer la calidad del agua, el cual garantiza que el producto es apto para el consumo humano. En consecuencia, al no tenerlo, se procedió a la clausura del local, como medida preventiva según lo estipulado por el Código Orgánico Administrativo”, indicó el comisario Orellana.
Orellana resaltó que de conformidad con lo establecido en la normativa legal para alimentos procesados de ARCSA, este tipo de negocios, cada año, deben realizar de forma obligatoria el análisis citado para poder ejercer la actividad comercial a la que se dedican.
Junto con el representante de la Comisaría Municipal estuvieron Jorge Manuel Díaz Armijos, analista zonal de la ARCSA; además de Cindy Ríos Asanza y José Andrés Ríos Carrión, técnicos de AGUAPAS.