Para evitar que el dinero asignado a municipios, prefectura y juntas parroquiales sea desviado o mal usado, el presidente Daniel Noboa Azin vetó totalmente la ley orgánica de reforma para ‘Asegurar la asignación directa y oportuna de recursos’ a los gobiernos autónomos descentralizados (GAD).
De acuerdo con la Secretaría General de Comunicación de la Presidencia, “El proyecto de ley aprobado por la Asamblea Nacional no consideró con responsabilidad elementos que estén acordes a la realidad fiscal del país, lo que pudo ocasionar un desfinanciamiento en el presupuesto general del Estado”.
Según el análisis del Gobierno Nacional, la iniciativa legislativa pretendía la entrega de asignaciones automáticas a las prefecturas, municipios y juntas parroquiales (GAD) desde el Banco Central, en perjuicio de otros sectores de gasto como seguridad, salud o educación.
“La propuesta legal de la Asamblea Nacional podía afectar las finanzas públicas y causar un grave riesgo para la estabilidad económica del país”, se lee en el comunicado oficial de la Presidencia.
Tras el veto, los legisladores podrán volver a tratar dicha norma en el plazo de un año y, transcurrido ese periodo, puede incluso ratificarla con el apoyo de los dos tercios del pleno.
